¡Lotería!

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Las loterías regionales pintadas a mano sobrevivieron las primeras décadas del siglo XX. Como la de Campeche, que se jugaba con fichas confeccionadas en cuero.

El juego de la lotería nació en Italia durante el Renacimiento, y se jugaba con monedas, diciendo versos picarescos. En México, este juego adquirió un sabor nacional inconfundible, con frijoles en lugar de las monedas, y los versos nacidos de la picaresca nacional.

“Ve a ver cuál es el toro que brama tras la loma, que ya no se le ven las patas: nomás la cabeza asoma: ¡61 toros!"

7 Falúas

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6 Gallinas

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5 Jaulas

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4 Brujas

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3 Piñas

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Fin de semana en Campeche

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Cada fin de semana, en el zócalo de la ciudad de Campeche, se organiza un enorme juego de Lotería Campechana, en el que los participantes tienen la opción de elegir entre las cartillas que se ofrecen en el lugar o llevar sus propias cartillas. En algunos casos las cartillas han pasado por varias generaciones de familias, las hay pintadas a mano, bordadas en punto de cruz, etc., un auténtico catálogo de arte popular.

Pero la lotería no sólo es sólo un entretenimiento que se lleva a cabo en plazas y lugares públicos, también algunas familias abren las puertas de sus casa a vecinos, amigos o cualquiera que guste de este juego, famosos son los juegos de los barrios de San Francisco, Santa Ana, San Román y Guadalupe.

Tradicionalmente se trataba de un juego de verano, pues las familias salían a la puerta de su casa y ahí, sentados en la acera, tomaban "el fresco" de la tarde mientras transcurrían las partidas.

Fotos: glennaa en Flickr

2 Palomas

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La lotería en Campeche

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Sin lugar a dudas, la lotería es uno de los juegos tradicionales más populares en México, en esto tiene que ver con la sencillez de sus reglas y lo barato que resulta adquirir las barajas y las cartas.
En Campeche existe una versión local en la que son 90 las figuras para ser cantadas y las cartillas están formadas por 25 casillas, esto hace más difícil el juego pero mucho más divertido.
Su origen se remonta al siglo XIX, una época en la que el juego era ilegal, de esta forma la gente colocaba apuestas en un juego de apariencia inocente, sin levantar sospechas en las autoridades.
En la Lotería Campechana algunos cuadros abrevan en la geografía y la fauna regionales, personajes locales, así como de la cultura popular.
A diferencia de la lotería tradicional mexicana, en la versión de Campeche no se emplean cartas para ir seleccionando las figuras a cantar, sino que se utilizan esferas numeradas, como las del bingo, que se extraen de una tómbola o costalito de tela, por lo que el encargado de cantar las figuras debe memorizarlas. El número extraído se complementa con el nombre de la figura: ¡1 martillo!… ¡34 águilas!… ¡58 corazones!… ¡90 mundos!
Otra de las peculiaridades del juego se encuentra en la cantada, en la que, en ocasiones, se emplean nombres de personajes públicos para hacer mofa de ellos en los estribillos.
En Campeche este juego es tan popular que la gente utiliza el nombre de las figuras como recurso mnemotécnico, para recordar todo tipo de números, y no es extraño recibir una lista de personajes de la lotería cuando se pide un número telefónico, sin que exista confusión alguna.

1 Martillo

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Antecedentes de la Lotería en México

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La Lotería tradicional se originó en Italia, de ahí llegó a España, y finalmente a México en 1769. Inicialmente se jugaba sólo por la sociedad aristócrata mexicana en la época colonial y poco a poco fue adoptada por las demás clases sociales. Durante el siglo 19 y principios del siglo 20, había pocos pueblos en México, distantes unos de otros. Durante los fines de semana llegaban ferias ambulantes a esos pueblos y la gente iba sobre todo a jugar Lotería. El juego de Lotería es muy parecido al Bingo americano, con algunas diferencias: en el Bingo, de un tambor giratorio se escoge un número con su letra correspondiente, mientras que en la Lotería, se toma una carta con una imagen a color de un mazo de cartas.

Las versiones modernas de la Lotería tienen además el nombre del objeto al calce, y un número en la parte superior. En ambos juegos, cada jugador usa una tabla con una combinación diferente. En el Bingo la tabla del juego tiene números dispuestos al azar en la parte inferior de cada una de las letras, mientras que en la Lotería, la tabla contiene varias imágenes diversas que coinciden con las de las cartas del mazo. Muchas de las Loterías antiguas no tienen nombres ni números, ya que originalmente el juego se decía en prosa. Estas tablas se hacían de hojalata o papel y fueron pintadas por artistas populares, algunos de los cuales se especializaron en este arte.

En el Bingo, una persona anuncia las letras con sus números y los participantes los marcan en sus tablas. En la Lotería, un jugador llamado "gritón" dice un pequeño poema improvisado, o bien una pequeña frase popular relacionada con la carta (por ejemplo: "El abrigo de los pobres", para la imagen del Sol, o "El que por la boca muere", para la imagen del Pescado). Cada jugador utiliza una ficha -frecuentemente son semillas de maíz o frijolitos- para marcar el cuadro correspondiente en su tabla. En cualquiera de los juegos el jugador que llene primero su tabla gritará "¡Bingo!" o "¡Lotería!" y ganará el juego y su premio correspondiente.

La forma de "gritar" la Lotería depende del contexto social en el que se está jugando. En una Iglesia, por ejemplo, los versos de la Lotería se entonan de manera conservadora, mientras que en ciertos ambientes de personas adultas pueden tener un lenguaje más atrevido y en doble sentido. La sátira y los asuntos relacionados con hechos actuales o de política son muchas veces usados para describir las imágenes de la Lotería, de hecho, siempre ha existido la relación de la imagen con la crítica social.
La Lotería ha sido un juego de azar que ha servido como un pasatiempo, y también con propósitos educativos. Debido a que las cartas de la Lotería incluyen la descripción de la imagen, éstas son utilizadas para enseñar a leer, a escribir, historia y valores sociales. En los Estados Unidos, muchos maestros bilingües usan este juego como una herramienta para enseñar.